Hay cosas que no empezaron con Trump

Las elecciones estadounidenses son un permanente recordatorio de que la interpretación de la realidad de Estados Unidos es más compleja que lo que se piensa, o al menos de lo que podemos percibir a través de las encuestas y análisis habituales. Y esta complejidad no se aplica sólo a la política, sino también a las relaciones económicas y comerciales.

Así, hay muchos que confían en que una victoria del candidato demócrata, Joe Biden, suponga un giro copernicano en las relaciones económicas y estratégicas con Europa, sin reparar en que hay ámbitos en los que Trump no ha supuesto más que la manifestación exagerada y aspaventosa de corrientes estructurales muy profundas que llevan décadas germinando.

Cuenta atrás para las elecciones en EEUU

El próximo martes 3 de noviembre se celebran las elecciones en EEUU. Están en juego la presidencia y la mayoría en el Senado –en la Cámara de Representantes parece clara la mayoría demócrata–. Las diferencias en política económica entre demócratas y republicanos son sustantivas, incluidas en tres áreas que tendrán un gran impacto a escala global, con los demócratas más favorables a: la lucha contra el cambio climático, la defensa de una mayor fiscalidad a las empresas (y más progresiva) y un mayor impulso del multilateralismo –además de la defensa de avanzar hacia una esquema de sanidad más público, con impacto, sobre todo, doméstico–. Estamos ya en la cuenta atrás de un proceso electoral que ha durado más de un año desde los primeros debates en las elecciones primarias del partido demócrata, de junio del año pasado.

El Brexit, la pesca y el general Moore

El 16 de enero de 1809 Sir John Moore, general del ejército británico responsable de las tropas desplazadas a España para ayudar a contener la invasión napoleónica, caía mortalmente herido en la batalla de Elviña, mientras defendía la costa gallega del ataque francés para poder evacuar a sus tropas.

Hoy, sin embargo, son los británicos quienes defienden hasta el último metro de su costa frente a la supuesta amenaza de los pescadores franceses y españoles, que tan sólo aspiran a seguir faenando después del Brexit como venían haciendo durante décadas. El problema es que en esta batalla se puede terminar torpedeando toda la negociación del Brexit.

¿Barra libre de ayudas de Estado?

El pasado 2 de octubre la Comisión Europea envió a los Estados miembros una propuesta de prórroga hasta el 30 de junio de 2021 del Marco temporal de ayudas estatales adoptado en marzo de 2020 como consecuencia de la pandemia de COVID-19.

Este Marco temporal ha permitido una amplia relajación –casi una barra libre– de las ayudas de Estado que han dado lugar a casi 3 billones en apoyos de Estados miembros al sostenimiento de sus empresas, la mitad de ellos aprobados en Alemania. La Vicepresidenta de la Comisión Europea responsable de Competencia, Margrethe Vestager, ha dicho que la prórroga “se ajustará a las necesidades continuas de las empresas, protegiendo al mismo tiempo el mercado único”. Fácil de decir, no tanto de hacer.

La Administración Pública y sus élites

El pasado 2 de octubre Jesús Fernández-Villaverde publicó un artículo titulado «Una gran estrategia para España (II): las élites públicas». En líneas generales, estoy muy de acuerdo con las propuestas formuladas por el profesor Fernández-Villaverde. Son propuestas muy concretas, lo que debería facilitar el debate. En este artículo sólo formularé comentarios sobre propuestas que no respalde o que considere que pueden matizarse.

El galimatías jurídico potencial de las elecciones de EEUU

En una entrada anterior se abordaba cómo las elecciones en EEUU se podían ver afectadas por el sesgo de disponibilidad, en virtud del cual, los acontecimientos más recientes tienen un mayor peso en nuestra toma de decisiones. La sucesión de acontecimientos sigue siendo vertiginosa. En tan sólo las dos últimas semanas: la información sobre la declaración de la renta de Trump (habría pagado 750$ en 2017) y sobre la de Biden (casi 300.000$, en 2019); la presentación formal de la nueva candidata al Tribunal Supremo, Amy Coney Barrett; las crecientes sombras sembradas por los republicanos sobre el voto por correo y su eventual no reconocimiento (lo que abre un amplio frente de disputas legales sobre estos votos); el muy criticado primer debate presidencial; la disputa entre la Cámara de Representantes y el ejecutivo sobre el nuevo paquete de estímulo fiscal en un momento en el que la recuperación de la economía ha perdido fuerza; la hospitalización de Trump con COVID-19 y el foco de contagio en la Casa Blanca (todavía en el período de incubación, con más posibles afectados).

Más detalles sobre el Fondo de Recuperación europeo

La Comisión Europea publicó, el pasado 17 de septiembre, detalles adicionales sobre el Fondo de Recuperación y Resiliencia (FRR), basándose en el Acuerdo del Consejo Europeo de 21 de julio de 2020. ¿Qué detalles son especialmente relevantes para España?

A partir del 15 de octubre (y hasta el 30 de abril de 2021), los Estados Miembros pueden enviar a la Comisión sus planes de recuperación y resiliencia (PRR), que recogerán sus estrategias nacionales de reformas e inversiones hasta 2026. Muy importante, los objetivos de esas reformas e inversiones deben estar en línea con los del FRR (avanzar en la transición ecológica y digital, así como fortalecer las economías nacionales) y los Estados Miembros deben considerar las recomendaciones específicas comunicadas a cada país por las autoridades europeas en los últimos años, especialmente 2019 y 2020. La valoración de dichos planes por la Comisión (y su posterior aprobación por mayoría cualificada por el Consejo Europeo) se efectuará teniendo en cuenta las mencionadas recomendaciones y esa valoración es previa al desembolso de fondos.