Mes: enero 2017

Los mercados y su luna de miel

Si algo no ha faltado en los casi tres meses desde las elecciones presidenciales de Estados Unidos (dos semanas desde la inauguración) es acción. La sensación de encontrarse dentro de una película, híbrido entre western y fantasía política futurista, no ha desaparecido. Ha habido marchas multitudinarias, peleas abiertas con la prensa, revelaciones de espías… La inquietud por el curso que pueden tomar los acontecimientos parece compartida por todos. ¿Todos? No, los mercados financieros y en particular las Bolsas, viven un momento dulce.

México: La cuesta del diecisiete

Con el tránsito del año, los traders suelen actualizar la lista de países considerados vulnerables. Es probable que la economía mexicana haya sido de las más evocadas en las salas de contratación durante las navidades. Y es que el nuevo presidente de su principal socio comercial les ha puesto en su punto de mira, amenazándoles con muros, aranceles, deportaciones masivas e incluso bloqueo a las remesas de los emigrantes. El peso mexicano se convirtió de hecho en uno de los más finos indicadores del estado de la contienda electoral estadounidense. Desde el 9 de noviembre ha perdido un 16% de su valor respecto al dólar.

¿Un mundo sin dinero en efectivo?

En los últimos años el gobierno de España ha ido reduciendo el límite máximo de pagos en efectivo, de 2.500 en 2012 a 1.000 euros en 2016. En mayo de 2016 el Banco Central Europeo anunció que dejaría de emitir billetes de 500 euros. En noviembre de ese mismo año la India eliminó drásticamente (y de forma un poco caótica) sus billetes de alta denominación. El objetivo de estas medidas ha sido, como es sabido, reducir las posibilidades de fraude que proporciona el pago en metálico. Pero más allá de la lucha contra el fraude, algunos economistas han venido defendiendo la posibilidad de un mundo sin apenas efectivo. ¿Cuáles serían las ventajas e inconvenientes de esta decisión?

Análisis económico: revisando los pilares

En los últimos años se ha puesto de moda desarrollar investigaciones académicas que vienen a cuestionar los pilares en los que se ha basado el análisis económico en las últimas décadas. Se trata de revisiones que en muchos casos reevalúan los modelos tradicionales adaptándolos a la nueva realidad tras la crisis financiera global, o refinándolos con las posibilidades que proporciona la información más precisa de los datos micro a nivel de empresa o los metadatos; pero en otros casos, directamente se cuestionan los supuestos base de los análisis clásicos. El resultado no es menor porque muchas de estas revisiones vienen a cuestionar recomendaciones tradicionales de política económica y apuntan a la construcción de un nuevo consenso. A título de ejemplo, se repasan tres de estas revisiones con implicaciones para la política monetaria, el mercado de trabajo y la inversión, desarrolladas por economistas de reconocido prestigio y presentadas en foros académicos con especial incidencia entre los gestores de política económica.

Sabios en la inopia

Alemania va bien. Esta es una de las escasas certidumbres del horizonte económico en el año que comienza. Mientras el euro ha llegado a la mayoría de edad (la unión monetaria ha cumplido 18 años, aunque los billetes y monedas tardaran tres años más); y como viene sucediendo desde que naciera, su suerte vendrá marcada por las ideas económicas alemanas, su influencia en la política de su gobierno y su interacción con las visiones económicas y políticas del resto de Estados Miembros. A finales de año el Consejo Alemán de Expertos Económicos presentó a Merkel su informe anual, titulado Tiempo de reformas.

Pensiones en España: ¿En busca de un equilibrio imposible?

Los ciudadanos españoles son hoy conscientes de las dificultades por las que atraviesa nuestro sistema de Seguridad Social en cuanto a su sostenibilidad y a la efectividad del derecho a percibir una pensión de jubilación, no ya en el medio o largo plazo, sino incluso en los próximos años. Tras largos  períodos de cotización percibirán, en el mejor de los casos, una pensión bastante reducida en comparación con lo que otros pensionistas han tenido en años o décadas anteriores.

El sesgo de supervivencia y el análisis económico

Abraham Wald fue un matemático húngaro experto en análisis estadístico y econométrico, geometría y teoría de la decisión. En 1931 se doctoró en Matemáticas por la Universidad de Viena bajo los auspicios de Karl Menger (el hijo del famoso economista), pero pese a su brillantez nunca le dejaron acceder a un puesto universitario: era judío, y el gobierno austríaco pro-nazi de entonces no lo permitía. En 1938, temiendo por su vida, emigró a Estados Unidos, aprovechando una invitación de la Comisión Cowles para la Investigación Económica (cuna de numerosos premios Nobel de Economía). Un día, en plena Segunda Guerra Mundial, recibió una visita inesperada de unos representantes del servicio de análisis del ministerio de Defensa para pedirle consejo. En la reunión le enseñaron un gráfico parecido al que encabeza esta entrada.

Renta básica: valores, incentivos y coste

La renta básica (RB) ‒una asignación monetaria pública incondicional para toda la ciudadanía‒ empieza con fuerza en 2017, con varios proyectos piloto previstos en Finlandia, Kenia, Oakland, Ontario, o Utrecht. La idea de la RB tiene un largo recorrido histórico cuya paternidad se ha atribuido al humanista español Juan Luis Vives (1492-1540) ya en el siglo XVI, que ha revivido en los últimos años, incluyendo en la agenda de los partidos políticos, en gran medida ligada a los retos que plantea la revolución de la economía de la información y la robótica en términos de sustitución del empleo. Se trata de una propuesta muy controvertida que encuentra defensores tanto desde el liberalismo como desde la socialdemocracia, pero también detractores desde ambas ideologías. Siguiendo el esquema de Anthony Atkinson (ethics, statistics and economics), el debate sobre la RB se puede articular en torno a tres grandes dimensiones: valores, economía y costes.

Próspero año y felicidad

Recuerdo una viñeta de Forges en la que los Reyes Magos acarreaban un enorme saco de carbón destinado a los preclaros economistas. Una buena forma de redimirnos sería ayudar a que la gente fuera un poco más feliz, cumpliendo así los deseos repetidos durante estos días. Que la economía pueda contribuir a la felicidad les sonará a muchos como una inocentada. Pues no. Un grupo de idealistas se reunieron hace tres semanas en la London School of Economics para pulsar el estado de la Ciencia de la Felicidad.