Muy pocas veces en el ámbito de la Economía uno puede hacer predicciones con cierto grado de certidumbre. Una de ellas fue hace años, cuando aseguramos que el Brexit era una pésima idea económica, ya que ningún país puede sustituir una plena integración en un mercado único durante cuarenta años por un simple acuerdo de libre comercio. Otra la adelantamos hace pocas semanas, al comenzar el presidente de Estados Unidos su guerra arancelaria, cuando afirmamos que era un suicidio económico y que “si las instituciones no son capaces de imponer cordura a Trump, serán los mercados, hartos de la incertidumbre, los que se encarguen de hacerlo”. Eso es precisamente lo que acaba de ocurrir.
Etiqueta: Coyuntura económica
Es la incertidumbre, estúpido
El mejor resumen de la política comercial de Trump lo hizo en la red X el economista Justin Wolfers: “Los aranceles van a ser activados/desactivados/pausados, y serán selectivos/universales, se aplicarán a nuestros aliados/enemigos/todos, con carácter inmediato/pronto/más adelante. Se mantendrán a corto/largo plazo porque son una política útil/herramienta de presión, y resolverán nuestro problema con el fentanilo/ el déficit comercial/la producción/los ingresos”. Es decir, un auténtico caos.
Riesgos geopolíticos en 2025
Un año más, la economía mundial se encuentra en una peculiar situación: estabilizada en muchos aspectos, pero sujeta a peligrosos riesgos geopolíticos. ¿Cuáles son los principales para 2025?
Varios de ellos están ligados a Estados Unidos y la forma en la que se desarrolle la presidencia de Trump, en al menos cinco ámbitos: la guerra de Gaza, la guerra de Ucrania, la relación con China, la relación con Europa y el proteccionismo comercial.
¿Quién tirará de la economía europea?
Cuando Mario Draghi presentó su informe en Bruselas el 9 de septiembre la idea era mejorar la competitividad europea, pero se le olvidó insistir en la necesidad de, mientras tanto, seguir creciendo. En 2024 el PIB de la eurozona aumentará apenas un 0,8%, una cifra que palidece frente al 2,8 estadounidense. Lo más grave es que este mal comportamiento de la eurozona se debe a la debilidad de las principales economías: Alemania, que no crecerá en 2024; Italia, que solo lo hará un 0,7%; Francia, cuyo PIB aumentará apenas un 1,1%; o Países Bajos, con un crecimiento del 0,6%. Tan solo se salva España, con un envidiable 2,1%.
El declive de la economía alemana
Hubo un tiempo en que Alemania era todo un referente. Tenía una economía potente, una modélica industria exportadora de alto contenido tecnológico y un sistema educativo óptimo. A nivel político, tenía unos líderes serios responsables que hablaban con franqueza a sus ciudadanos y que mantenían unas finanzas saneadas, además de unos sindicatos responsables capaces de moderar sus salarios para salvar la industria. Hoy Alemania no es tan envidiada: su industria está gravemente dañada, su economía no crece y las malas decisiones políticas de las últimas décadas le están pasando factura.
Política monetaria e incertidumbre
Desde 1982, la Reserva Federal de Kansas City organiza cada año a finales de agosto un simposio de política económica para los banqueros centrales y ministros de economía de todo el mundo. Tiene lugar en Jackson Hole, un profundo valle en las Montañas Rocosas de Wyoming por el que discurren numerosos ríos en los que se pescan truchas (motivo que terminó de convencer en su día a Paul Volcker para acudir y consolidar la reunión).
La tercera plenaria y el futuro económico de China
Dos veces por década, el Partido Comunista de China celebra un gran congreso en el que se elige a los miembros del Comité Central. Entre congresos, el Comité –que no es una institución permanente– celebra siete sesiones plenarias a las que asisten sus 376 miembros (205 miembros titulares más 171 alternos), y en las que se establecen las grandes líneas de actuación para los siguientes años.
La UE tras las elecciones
Las elecciones europeas del 9 de junio no han alterado sustancialmente el bloque de los partidos moderados proeuropeos: los 190 escaños de los populares (EPP), los 136 de los socialdemócratas (S&D) y los 80 de los liberal-demócratas (Renew) suman 406 escaños de un total de 720, una mayoría relativamente sólida en comparación con lo que algunos se temían.
La encrucijada de la economía china
China creció un 5,2% en 2023. Tras ese buen dato coyuntural se ocultan muchas sombras estructurales y toda una encrucijada económica.
En primer lugar, hay sombras sobre las propias cifras. Aunque nadie pone en duda que la economía creciera en 2023, impulsada por el consumo tras el fin de la política de Covid-cero, la inversión sigue mostrándose muy débil. La caída de los precios de un 0.3 no ayuda. El sector inmobiliario, tocado tras la crisis de Evergrande, sigue hundiéndose, con caídas continuadas de los precios de la vivienda nueva, de las ventas de inmuebles y de nuevas construcciones. Muchas entidades locales y una parte del sistema financiero han sido arrastrados en esa caída, aunque el gobierno central se resiste a un rescate para no fomentar la irresponsabilidad (una decisión que le puede costar cara). Algunos analistas apuntan a que el crecimiento real podría estar bastante por debajo de ese 5.2% anunciado.
Crecimiento macro y micro
Imagínense ustedes que tienen un pequeño comercio con tres empleados. La pandemia de covid y la guerra de Ucrania –dos shocks de oferta de primer orden– han deteriorado gravemente la rentabilidad de su negocio. Por un lado, los costes de la electricidad se han disparado. El propietario del local le ha subido el alquiler (indexado por contrato a la inflación). Los tipos de interés han encarecido la hipoteca con la que financió la apertura de su tienda y los bancos se muestran cada vez más reacios a seguir financiando su circulante. Ha tenido que subir el sueldo a sus empleados y se ha visto obligado a elevar los precios de sus productos, pero muy poco, ya que tiene miedo de que sus clientes se pasen a la competencia. Llega a casa y en el telediario le dicen que la economía va muy bien, que ha crecido un 2,5% (bastante más que la media europea), y usted no entiende nada.