
Hace ya más de un año que comenzamos esta serie de entradas sobre estancamiento secular, y que concluimos hoy. Desde entonces, la coyuntura económica mundial ha mejorado notablemente, de manera bastante generalizada por países y áreas, disipando en buena medida el pesimismo anteriormente reinante. Sin embargo, haríamos bien en tomarnos con cautela esta recuperación, dado que estamos ante una fase alcista del ciclo económico mundial con unas peculiaridades muy llamativas y sin precedentes en la historia reciente.








