El despertar de una ilusión

El hecho de que, tras la dimisión de Liz Truss, se contemplara la posibilidad del retorno de Boris Johnson como primer ministro es el mejor indicador de hasta qué punto el partido conservador británico está perdido en un laberinto del que no sabe salir. Convertido en una especie de club de fútbol que, tras presentar con alharaca al nuevo entrenador, lo echa a patadas al domingo siguiente tras la primera derrota, el grupo parlamentario de los tories se enfrenta a un escenario problemático.

Oligopolios en el comercio mundial

La defensa del sistema de asignación de recursos por el mercado parte de una premisa fundamental: que hay múltiples agentes económicos que compran y venden y ninguno tiene capacidad de influir sobre el precio (que resulta entonces un buen indicador de la escasez relativa). La teoría, ya se sabe, es muy bonita, pero muchas veces las cosas no son así.

Los siete males de la libra esterlina

El ministro de Economía del nuevo gobierno del Reino Unido, Kwasi Kwarteng, anunció el viernes 23 de septiembre la segunda mayor expansión fiscal de su historia. La primera fue a comienzos de los años 70, con el llamado “boom de Barber”. Se produjo también en un contexto inflacionista, y también salió mal.

El Reino Unido después de Boris Johnson

El próximo lunes 5 de septiembre el partido conservador del Reino Unido elegirá a su nuevo líder y, por tanto, primer ministro del país. Al final la disputa se ha quedado entre Liz Truss y Rishi Sunak, con clara ventaja para la primera. La semana que viene el Reino Unido sustituirá a Boris Johnson, pero quien anhele una vuelta a la racionalidad y al pragmatismo británico puede esperar sentado.

El mito de Alemania

El inconsciente es muy poderoso. Durante décadas el nombre de Alemania ha estado asociado en el imaginario colectivo mundial a la seriedad y a la profesionalidad: eficiencia productiva, tecnología de primera línea, líderes políticos que dicen la verdad a sus ciudadanos, formación profesional impecable, sindicatos responsables, debates televisivos de calidad, control de las finanzas públicas…

Ucrania, la estrategia y la logística

Omar Bradley, el último general de cinco estrellas del ejército estadounidense, solía decir que, al discutir sobre la guerra, los aficionados hablan de estrategia y los profesionales hablan de logística. Y tenía razón: la sostenibilidad de las guerras depende en gran medida de complejas cadenas de suministro que exigen una economía nacional sólida y operativa. Y, pese a lo que algunos piensen, la logística rusa no está ni mucho menos garantizada.